Kristina Light
Kristina Light es el libro con las mejores recetas ligeras de Kristina.
Mis recetas :: Kristina Wetter
Decora los tradicionales Huevitos de Pascua y ponlos en tu mesa de este domingo.
Con el advenimiento del cristianismo, el huevo se convirtió en el símbolo de la resurrección. Las diferentes culturas los han decorado durante la Pascua y cada una ha desarrollado su forma particular de hacerlo.
Quizás por ser los más elaborados, los más famosos son los pysanki, los huevos decorados de Ucrania. Estos se adornan con una técnica tradicional donde se utiliza la cera para crear diseños multicolores que lo cubren en su totalidad y, durante estas fechas, se llevan a la iglesia en cestas tradicionales para recibir la bendición. Los mexicanos también decoran sus famosos cascarones con papel y pintura, y los llenan de papelillos. En los Estados Unidos, se celebra la Pascua con una tradición que llegó a América de la mano de los primeros inmigrantes alemanes, quienes organizaban una búsqueda de huevos pintados que el conejo de Pascua escondía en la mañana del domingo de Resurrección para los niños de la casa. En Dinamarca, al igual que en Inglaterra y otros países, las familias pintan huevos de diferentes colores y los más pequeños bajan las colinas arrastrandolos y procurando que no se rompan. Para mi, los más lindos y fáciles de hacer son los de Austria, donde decoran los huevos utilizando diseños naturales: sujetan a la cáscaras pequeñas hojas de plantas y luego los hierven en colorante, para descubrir, en blanco, los diseños de las hojas utilizadas. Aún cuando la tradición varíe según las culturas, decorar los huevos de Pascua representa un homenaje a la vida y la renovación que se comparte en familia.
Para decorar tus huevos, puedes hervirlos y decorarlos duros, o puedes soplarlos para eliminar el contenido. Si decides hervirlos, recuerda abrir un agujerito con un alfiler en cada extremo para evitar que se resquebrajen. Si te decides por lo segundo, lava bien los huevos crudos y sécalos con un pañito de cocina. Abre los agujeritos un poco más grandes. Introduce el alfiler o un clip de forma tal que puedas romper la yema para facilitar la salida del contenido. Sopla por el agujero del extremo superior tan fuerte como puedas hasta que salga primero la clara y después la yema. Lava cualquier residuo que pudiera quedar y deja secar bien antes de decorar. Utiliza el contenido del huevo para preparar una deliciosa omelette o una frittata italiana, pero antes, reserva un poquito de clara que necesitarás para la decoración.
Selecciona las hojitas de cilantro, perejil plano y eneldo que veas más bonitas. Con un pincel pequeño, aplica un poquito de clara en el reverso de la hoja. Colócala en el centro de la cáscara del huevo y déjala secar bien. Puedes utilizar una pinza para ayudarte a colocar las hojitas.
Toma una media de nylon que no vayas a utilizar y córtala en tiras. Coloca el huevo dentro de la media, la cual servirá para sujetar la hojita en su lugar. Estira bien la media y amarra por detrás con pabilo. Prepara tantos colorantes como colores quieras darles.
Coloca el agua y el vinagre en una taza o en un recipiente donde puedas sumergir los huevos. Añade el colorante comestible. Sujétalos por el pabilo, sumérgelos y déjalos reposar en el colorante. Si usas huevos duros, verás que se sumergen con más facilidad. Si los usas soplados, debes sostenerlos con una cuchara. Déjalos durante cinco minutos o más, según la intensidad que desees. Retíralos y déjalos secar bien sobre una servilleta. Corta el pabilo y cuidadosamente, saca el huevito de color. Retira suavemente la hojita, para descubrir el diseño blanco que dejó sobre la cáscara. Recuerda que estos huevos son exclusivamente decorativos y es recomendable no comerlos. Yo los pongo como centro de mesa el Domingo de Resurrección.